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Prevención de la infertilidad estacional en cerdos
09 October 2015La infertilidad estacional en cerdos puede atribuirse en gran medida al estrés térmico, pero también influyen otros factores, por lo que la concienciación y el manejo son fundamentales para maximizar la producción. Un artículo de Melanie Jenkins.
Los sistemas de producción porcina al aire libre son especialmente susceptibles a la infertilidad estacional, principalmente debido a la duración de los días y a las altas temperaturas. No es posible modular ninguna de estas causas, pero pueden mitigarse.
Los cerdos criados en interior son menos susceptibles, pero también pueden experimentar problemas asociados al calor, por lo que disponer de un buen aislamiento y una ventilación adecuada es vital para minimizar el riesgo.
La Dra. Charlotte West, responsable de innovación técnica en AHDB Pork, señala que el cerdo puede sufrir estrés térmico cuando su temperatura corporal se eleva un par de grados por encima de su valor normal, lo que puede repercutir negativamente en su rendimiento reproductivo.
"En estas circunstancias, el cerdo incrementará en primer lugar su frecuencia respiratoria para intentar enfriarse y luego buscará en su entorno otras formas de conseguirlo, como revolcarse en el barro y yacer sobre orina".
El estrés térmico puede causar un sufrimiento innecesario y reducir la productividad, explica la Dra. West.
"Los cerdos expuestos a altas temperaturas pueden experimentar una importante disminución del índice de crecimiento; el índice de partos en una granja de reproducción puede descender hasta un 25%, a lo que se suma una pequeña caída en el tamaño de las camadas".
Factores que deben contemplarse:
Altas temperaturas. La zona térmica neutra "normal" de los cerdos puede variar entre los 7 °C y los 21 °C. La exposición prolongada a las altas temperaturas puede dar lugar a estrés térmico y reducir la productividad, causando incluso la muerte en algunos casos. Los cerdos criados en exterior tienden mostrar menos resistencia a las altas temperaturas que los cerdos estabulados, ya que están mejor adaptados a las bajas temperaturas.
El estrés térmico también puede afectar al peso de los lechones al nacimiento si el flujo de sangre a los fetos en desarrollo se redirige a la piel para ayudar a reducir la temperatura corporal.
Quemaduras solares. La exposición prolongada a la luz solar puede provocar quemaduras, a las que las cerdas nulíparas son especialmente susceptibles al ser trasladadas por primera vez al exterior o a un alojamiento con corral exterior.
Ingesta de pienso. Según Angela Cliff, responsable de transferencia de conocimientos de AHDB Pork, es difícil mantener el apetito de las cerdas durante la época de calor, pero es esencial conseguirlo para preservar su salud y, por consiguiente, para la ingesta de nutrientes, especialmente durante la lactación. Las cerdas cuya salud se vea menos afectada deberían recuperar el celo entre cuatro y cinco días después del destete.
Ingesta y calidad del agua. Las altas temperaturas no solo disminuyen el apetito de los cerdos, sino que también es posible que beban menos agua menos con el fin de conservar energía, lo que puede obstaculizar el crecimiento. La calidad del agua también sufre con el calor, ya que favorece la proliferación de microbios.
Fluctuaciones en el intervalo destete-celo y fallo reproductivo. "Las altas temperaturas pueden afectar negativamente a las hormonas involucradas en la gestación e interferir con el ciclo estral, lo que da lugar a celos de duración variable, reduce el índice de ovulación y aumenta la mortalidad embrionaria", añade Angela Cliff. Las cerdas pueden ser particularmente susceptibles durante los primeros 15 días después de la cubrición.
Libido de los verracos. El calor puede aletargar a los verracos y menoscabar su interés por trabajar.
Calidad del semen. Las altas temperaturas pueden reducir la calidad del esperma durante un periodo que puede llegar a las ocho semanas.
Conservación del semen. El semen debe conservarse en un contenedor de almacenamiento regulado mediante termostato y protegido de la luz solar para evitar su deterioro.
Más vale prevenir que curar
Revolcarse en el barro y hozar en la tierra fría son los dos métodos principales que los cerdos utilizan para refrescarse al aire libre, explica la Dra. West: "El calor se disipa mediante la evaporación del agua sobre la piel y la capa de barro puede reducir las quemaduras solares".
Es aconsejable preparar revolcaderos antes del verano, procurando llenarlos regularmente de agua durante los periodos secos pero sin permitir que se estanquen, lo que podría dar lugar a infecciones.
"Los revolcaderos deben tener espacio suficiente para el doble del número de cerdos al que están destinados, ya que de este modo los animales más sumisos también podrán utilizarlos", añade.
La sombra es otro factor importante. Los cerdos tienen más probabilidades de ser susceptibles a finales de la primavera y principios del verano, cuando están expuestos a la primera luz solar intensa después del invierno. Las quemaduras graves, que causan ampollas en la piel, pueden provocar el fracaso de la gestación, mientras que el dolor y la incomodidad aumentarán el estrés que sufren los animales.
El barro puede reducir las quemaduras solares en los cerdos, pero sigue siendo importante ofrecer una sombra con un lecho de paja limpia que les anime a utilizarla.
Es igualmente necesario preparar el alojamiento al aire libre para que mantenga la temperatura más baja posible frente al calor estival. Uno de los modos más eficaces de conseguirlo consiste en pintar el exterior de blanco.
Según la Dra. West, esto puede rebajar la temperatura interna hasta 7 °C. Otro método podría consistir en mantener los arcos bien aislados, aprovechando el viento dominante y abriendo los respiraderos posteriores para aumentar la ventilación.
En el caso de las granjas de reproducción, cubrir a las cerdas al amanecer y el atardecer, cuando la temperatura es más baja, también puede ser de ayuda.
"Es asimismo importante mantener una higiene adecuada, especialmente si es probable que las cerdas se hayan revolcado en el barro", explica la Dra. West.
El estrés térmico también puede disminuir la libido de los verracos y reducir la viabilidad del semen hasta ocho semanas, por lo que es importante comprobar su calidad después del último periodo de estrés térmico o de mala salud. "Los verracos no trabajarán si hace calor, por lo que todas las extracciones de semen deben realizarse al amanecer o al atardecer".
Cómo minimizar el estrés térmico en interior
Es posible reducir el riesgo de estrés térmico en interior de diversas formas, que van desde asegurar la eficacia del aislamiento en los edificios a instalar sistemas de alarma que vigilen la temperatura.
La ventilación es también importante, al igual que evitar las fluctuaciones de temperatura diarias.
"Debe contemplarse el uso de ventiladores adicionales en grandes corrales, procurando que el sistema esté limpio y funcione correctamente, ya que el polvo puede limitar su eficiencia", señala Angela Cliff. Los sistemas de aspersión son un buen complemento de los ventiladores a la hora de ayudar a enfriar a los cerdos, añade.
El acceso al agua es fundamental. Se recomienda instalar bebederos de tipo chupete en una proporción de uno por cada 10-15 cerdos y comederos con un espacio mínimo de 1 cm por animal hasta un máximo de 35 kg de peso vivo.
Para cerdas en lactación, el caudal del suministro de agua debe ser de entre 2 y 2,5 litros por minuto, mientras que en granjas de crecimiento y engorde deberá ser de 1 a 1,5 litros por minuto por cada 30-70 kg de peso vivo.
La genética también puede ser un factor importante. Un estudio realizado por AHDB Pork con 32.935 cerdas en 29 granjas entre 2004 y 2009 concluyó que la infertilidad estacional puede tener causas parcialmente genéticas, ya que más del 25% de las cerdas no se vieron en absoluto afectadas.
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