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¿Reducen las mascarillas la exposición a la influenza porcina?

06 December 2024

La transmisión del virus de la influenza A (IAV) entre cerdos y trabajadores de granjas porcinas es un riesgo para la salud pública. Los trabajadores agrícolas pueden exponerse al IAV por contacto directo con animales infectados e indirectamente al tocar superficies contaminadas y respirar aerosoles infecciosos que contienen partículas cargadas de virus.

Los trabajadores de granjas porcinas pueden respirar aerosoles con el virus de la influenza porcina A

Fuente: The Pig Site

Por: Chris Wright

Nota del editor: Debido al actual brote de influenza aviar altamente patógena en los EE. UU. que ha causado infecciones en trabajadores de granjas avícolas y lecheras, este estudio de la industria porcina parece muy relevante en todas las especies. Lo siguiente es de una presentación de Joaquín Álvarez-Norambuena y colegas, Universidad de Minnesota, durante la Conferencia Leman Swine 2024.

Se puede utilizar equipo de protección personal que consiste en mascarillas faciales para disminuir el riesgo de exposición a aerosoles. Algunas de las mascarillas que los trabajadores agrícolas pueden usar para protegerse incluyen respiradores N95, mascarillas antipolvo y mascarillas quirúrgicas. Sin embargo, la comodidad y el nivel de protección que ofrecen estas mascarillas varían mucho entre ellas.

Un estudio evaluó y cuantificó la reducción de la exposición al IAV mediante diversas mascarillas faciales en trabajadores agrícolas. En última instancia, este estudio tuvo como objetivo validar estrategias de intervención para disminuir la transmisión de la influenza en la interfaz entre cerdos y personas.

En el estudio se inscribieron veinticuatro trabajadores porcinos de tres granjas del Medio Oeste. Las granjas seleccionadas tenían infección confirmada por VIA en los cerdos. La participación de los trabajadores en el estudio fue voluntaria y los participantes podían abandonar el estudio en cualquier momento.

Se pidió a los trabajadores que usaran una de las tres máscaras en un día determinado, que incluyó una máscara N95, una contra el polvo o una quirúrgica. También se pidió a los empleados que no usaran mascarilla como parte de uno de los tratamientos. Cada trabajador usó cada tipo de mascarilla durante un total de 5 días. Se pidió a cada participante que tomara una muestra de un hisopo nasal antes de usar la mascarilla al comienzo de la jornada laboral. Luego usaron la mascarilla asignada durante al menos 2 horas cada día. Después de eso, los trabajadores se quitaron la mascarilla y recogieron ellos mismos otro hisopo nasal.

Un total de 79 de 832 (9,50%) muestras dieron positivo a RT-PCR para IAV. Veintiocho de 416 (6,73%) muestras recolectadas antes de usar la mascarilla dieron positivo, mientras que 51 de 416 (12,26%) dieron positivo después de usar la mascarilla.

El estudio actual proporciona evidencia de que el uso de mascarillas disminuye el nivel de exposición al IAV en los trabajadores de granjas porcinas. Los resultados se suman a la evidencia de que la exposición al IAV en las granjas porcinas es común y que el uso de mascarillas debe considerarse como una de las estrategias para disminuir el riesgo de infección en la interfaz entre humanos y animales.

Este trabajo fue financiado por National Pork Board.

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